Vistas de página en total

domingo, 19 de abril de 2009

desentona. se sale del marco de corrección. "quién puede soportar a éste tipo?" preguntó un diplomático de carrera. crónica de Hoy Bolivia.

Mientras los demás presidentes sueramericanos consideran que se dio un cambio Morales ataca a Estados Unidos
Evo es el único presidente que desentona en la Cumbre

TRINIDAD Y TOBAGO - Mientras los países de América Latina ven con buenos ojos el cambio de rumbo en la política de los Estados Unidos, con la llegada al poder del presidente Barack Obama, el presidente Evo Morales desentona en la Cumbre hemisférica con declaraciones poco acertadas y fuera de contexto.
Morales, citado por la BBC Mundo, dijo este sábado en una rueda de prensa que el gobierno estadounidense sigue "conspirando" contra su gobierno pese a la estrategia de acercamiento con la región de la que habla el presidente Obama.
"Morales se refería al supuesto plan para asesinarlo del que las autoridades bolivianas informaron el jueves y que terminó con un enfrentamiento en el que la policía mató a tres supuestos magnicidas: entre ellos un irlandés y un rumano", destacó el portal de la BBC Mundo.
El gobierno boliviano no ha acusado directamente a Washington del frustrado plan de magnicidio, pero Morales dijo haber pedido a Obama que repudiara públicamente la acción y que en caso contrario "podría llegar a pensar que la embajada estadounidense está involucrada".
"Obama dijo tres cosas. No hay socios mayores o socios menores. Dijo que las relaciones tienen que ser de mutuo respeto y habló de cambio" dijo Morales, pero se quejó de que "en Bolivia uno no siente cambio alguno. La política de conspiración continúa".
La postura del presidente boliviano contrasta radicalmente con el resto de los presidentes, incluso con Hugo Chàvez, ferviente enemigo de la potencia mundial a la que ataca en cada uno de sus discursos identificando al "imperialismo" como el pero enemigo de América.
Chávez fue uno de los primeros en saludar a Obama, este viernes antes de que se inaugure la Cumbre en Puerto Espama, donde los países debían tratar entre otros de interés común, la crisis económica mundial.
Y es que mucho se había especulado con el primer encuentro entre Barack Obama y Latinoamérica, después que creciera el pedido para que Estados Unidos levante el embargo a Cuba y porque desde la era Busch, las relaciones entre la primer potencia y suramérica se habían deteriorado al máximo.
Pero Obama llegó a Trinidad y Tobago convencido de que se metería al bolsillo a los líderes regionales y así lo hizo.
"El gran test era un avance en relación a Cuba. Creo que fue dado un paso pequeño en la dirección correcta," dijo el canciller de Brasil, Celso Amorín, en rueda de prensa al final de la reunión de la Unión de Naciones del Sur, Unasur, con el presidente Obama.
Y ante la ausencia de una delegación cubana con la cual medir el acercamiento, muchos ponderan los cordiales intercambios que han tenido el presidente Obama y su colega venezolano, Hugo Chávez, informó la BBC Mundo.
Incluso el mandatario venezolano aseguró a la prensa que "está pensando" designar un nuevo embajador en Washington, cargo que está vacante desde que en noviembre de 2008 Caracas expulsó al representante estadounidense en "solidaridad" con Bolivia, que también echó al embajador en La Paz.
Amorín considera que los próximos pasos deben conducir a un diálogo directo, e incluso aseguró que el presidente Luis Inacio Lula Da Silva considera "muy difícil que haya una nueva Cumbre de las Américas y que Cuba no esté presente".
El presidente uruguayo Tabaré Vásquez dijo a los periodistas que "el presidente Obama quedó en estudiar este planteamiento".
Pero Cuba es sólo la medida de cómo se ha dado desde el primer momento la interacción entre los presidentes americanos en un ambiente de camaradería y cordialidad que no todos esperaban, sobre todo quienes recordaban la experiencia de la Cuarta Cumbre de las Américas de Mar del Plata, Argentina, en 2005.
En palabras de la presidenta de Chile, Michelle Bachelet -quien ejerce la jefatura temporal de Unasur- la reunión está fortaleciendo la confianza mutua.
"En esta reunión hemos entendido que es una primera fase de la construcción de confianza en un cambio de la relación de Estados Unidos con América del Sur", dijo Bachelet.
Alan García, presidente de Perú, expresó en tanto que Sudamérica no llegó al encuentro "con una posición mendicante", aunque recalcó que la región está fuertemente conectada con la economía de Estados Unidos y es importante para su recuperación.
"Esperemos que ahora todas estas cosas que hemos charlado se plasmen en realidad", añadió, tras recalcar que "es una oportunidad histórica para cambiar la Historia".
OBAMA PIDE SUPERAR EL PASADO
Un nuevo gesto entre el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el mandatario venezolano, Hugo Chávez, marca este sábado el espíritu de entendimiento al inicio de los debates entre los presidentes y jefes de gobierno sobre la declaración final de la Quinta Cumbre de las Américas.
La cordialidad entre los mandatarios ha dominado las discusiones iniciales del encuentro, que empezó el viernes en Puerto España, capital de Trinidad y Tobago.
Y éste es también el tono que ha prevalecido en los breves encuentros entre Obama y Chávez.
Los presidentes de las 34 naciones asistentes debatieron durante la mañana el primer tema de la agenda sobre la Prosperidad Humana, un encuentro que se realizó a puertas cerradas y sin presencia de la prensa.
Hacia mediodía los mandatarios deberán tomarse la foto de familia característica de este tipo de encuentros, antes de seguir sus deliberaciones en horas de la tarde.
Posteriormente hablarán de la seguridad energética, gobernabilidad y crecimiento ecológicamente sustentable.
Las actividades del sábado empezaron horas antes con un encuentro entre el presidente de EE.UU., Barack Obama, y los mandatarios de los 12 países que forman la Unión de Naciones de Sur América, Unasur.