El consejo de administración aprueba su traslado de domicilio social tras la solución dada por el Gobierno vía decreto
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Caixabank ya tiene oficialmente fuera de Cataluña su sede social para proteger a sus depositantes. El consejo de administración de la entidad presidida por Jordi Gual ha aprobado este viernes por la tarde el traslado de su domicilio legal y tributario de Barcelona a Valencia. Con esta medida, que el tercer banco español ha podido tomar gracias al decreto a medida aprobado horas antes por el Gobierno, Caixabank sigue los pasos del Sabadell y otras entidades menores y empresas de otros sectores que también han abandonado la comunidad ante el órdago secesionista.
«Caixabank hace público que, siendo prioridad de toda entidad financiera la protección de sus clientes, accionistas y empleados, y con el objetivo de salvaguardar plenamente la seguridad jurídica y regulatoria consustancial al ejercicio de su actividad, el consejo de administración ha decidido, por unanimidad, ante la actual situación política y social en Cataluña, adoptar las medidas que sean necesarias para trasladar el domicilio social a la calle Pintor Sorolla, 2-4, de Valencia», ha explicado en un comunicado a la CNMV.
El motivo detrás de la decisión tanto de Caixabank como del Sabadell es que la declaración unilateral de independencia, en caso de producirse, les dejaría fuera del Eurosistema, y por tanto sin acceso a la liquidez del Banco Central Europeo (BCE), así como sin la protección del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD). De hecho, el temor a esta situación ha provocado muchas dudas entre los clientes, de forma que ambos bancos estarían sufriendo una salida importante de depósitos, tanto por esas dudas como por una suerte de boicot por su origen catalán.
De hecho, esa afectación al negocio es lo que ha precipitado el cambio de sede, que no estaba previsto tomar hasta qué pasos daría la próxima semana la Generalitat de Cataluña. El Sabadell pudo ejecutar la mudanza ayer mismo porque ya había adaptado sus estatutos sociales para ello en 2015 ante el recrudecimiento del desafío secesionista. Caixabank, en cambio, aún no había hecho ese trámite, que necesita de la convocatoria de la junta, lo que ahora lo hubiese retrasado varias semanas.
Por eso la cúpula del grupo, con Isidro Fainé a la cabeza, como informó ABC este viernes, solicitó al Gobierno un cambio legal exprés para evitar ese trámite y aprobar su traslado de forma inmediata. Así, el Consejo de Ministros ha dado luz verde hoy a nu real decreto ley que permite al consejo de administración de las empresas aprobar el cambio de domicilio social digan lo que digan los estatutos, permitiendo así al banco y otras empresas el cambio de sede ya, antes del próximo lunes.