“Macron es un hombre que se programó a sí mismo para ser presidente desde el colegio”

Los expertos vaticinan este domingo el triunfo de Emmanuel Macron sobre la candidata del Frente Nacional, Marine Le Pen, del 59% frente al 41%. Un candidato que ha sabido hacer fortuna antes de entrar en política y se ha ido formando mientras esperaba su momento.

En este largo camino también cumplió y muy temprano parte de sus aspiraciones personales. Los que le conocen bien aseguran que el ‘fenómeno Macron’ se ha ido forjando con duro trabajo y la clave de su éxito se llama “perseverancia”. Así lo explica a OKDIARIO Carlos Carrasco, doctor en Ciencias Políticas, ex ministro de Educación en Bolivia; ex embajador en Canadá, Francia, Portugal, Túnez, y delegado en la UNESCO cuya sede en París sirve de punto de encuentro para nuestra entrevista.

Carrasco imparte actualmente clases de Ciencias Políticas en París y ha seguido de cerca la evolución del candidato que desde niño ya apuntaba maneras para ser presidente: “Macron es un hombre que se programó a sí mismo para ser presidente desde el colegio”.

P.- ¿Cómo ha visto la campaña francesa?
R.- Ha sido muy interesante porque es la primera vez que se celebran unas primarias en ambos partidos, republicanos y socialistas, que han sido la crónica de un suicidio anunciado. Las luchas internas de ambos les han arruinado. En el caso del partido socialista, no ganaron los favoritos en la contienda como Manuel Valls quien fue excluido por Hamon que no tiene la estatura intelectual para este cargo.

En el sector conservador también perdió el favorito Alain Juppé en favor de François Fillon que se decía que tenía las elecciones ganadas frente a Le Pen. Asumieron demasiado temprano que el frente republicano tenía las de ganar como sucedió en 2002 cuando Jacques Chirac se enfrentó contra Jean-Marie Le Pen, el padre de la actual candidata Marine Le Pen, y ganó 62% frente al 16%.

“Macron ha tenido buenos padrinos políticos”

P.- ¿Quién piensa que va a ganar el domingo?
R.- Macron con un buen margen. Desde la escuela apuntaba maneras y siempre era el primero. Antes de meterse en política hizo fortuna como banquero y luego ha tenido buenos padrinos políticos que le han ayudado. El presidente François Hollande lo nombró subsecretario general en el Elíseo y luego tuvo trabajos de carácter económico que le ayudaron a forjarse como líder. El resto de sus compañeros pronto se dieron cuenta de su enorme talento.

El punto de inflexión se produce cuando Macron empieza a ver a Hollande como un buen hombre pero ineficaz en la función pública y se dijo a sí mismo que por su propio país había que poner freno a esto y organizarse bien.

“Hollande ve su impopularidad y aúpa a Macron”

P.- ¿Las políticas de Hollande han sido un globo que se ha desinflado en Francia?
R.- Así es. Admiro la audacia de los líderes políticos que quieren llegar a presidir sin estar preparados. Son holgazanes particulares. No es el caso de Macron, que es un hombre culto y un gran carácter que se ve en su vida personal: a sus 15 años enamorarse de una señora de 35 años es una audacia.

Se empeñó en hacerla su esposa y en que se divorciara de su marido con hijos. Sus padres lo aíslan en Amiens (Francia) pero finalmente cumple su ambición y se casa con ella. Todo esto le da tiempo para estudiar y prepararse. Al mismo tiempo sucede que Hollande ve que su impopularidad le impediría presentarse y aúpa a Macron frente a Valls.
P.- ¿Aquí comienza el ‘fenómeno Macron’? 

R.- Sí, porque detecta la impopularidad de los candidatos y de los partidos tradicionales, en decadencia, y lanza su movimiento ‘En Marche’ que tiene sus propias iniciales ‘EM’. Para esta apuesta se rodea de un pequeño grupo de ex consejeros y, anteriormente, ya había hecho grandes amistades con la prensa francesa. Basta leer algunos periódicos para darse cuenta de que el ‘fenómeno Macron’ crece como una bola de nieve y se convierte en imparable.

P.- ¿Por qué quiso desvincularse de las ideas de los suyos? 
R.- Sólo de algunos porque observó que no gustaban o eran dañinas y por los fallos de Hollande y la incapacidad de la oposición. Sus ideas han ido progresando. Su primer discurso decía: “Lo que voy a poner en marcha es el verdadero discurso republicano: igualdad, libertad y fraternidad”. En medio de estas palabras construyó su programa que le dio más adelante la solidez ideológica.

Su paso por el ministerio de Economía también le ha dado muchos elementos programáticos y humanos. De ahí extrae los mejores cerebros para su equipo. Su movimiento comienza a atraer a ciudadanos de distinta ideología.

P.- Llegados a este punto… ¿Qué fallos tiene Macron?
R.- Es imposible ocultar la admiración que tiene para su propia persona. Si se compara con sus padres, él es mejor. El ego en política no es bueno, pero a veces es necesario soslayar tu propio talento para no ofender a aquellos que no lo tienen y Macron no tiene eso. En 39 años ser impoluto no es fácil. Hasta ahora no han encontrado nada y veremos si sigue así.